Claro que hay muchísima proteína en la carne, pero eso no significa que no haya en ningún otro sitio. De hecho, los veganos hacemos simplemente lo mismo que las vacas, los cerdos, las ovejas y los pollos, vamos a la fuente : las plantas.
Las legumbres (judías, cacahuetes, guisantes, lentejas y soja), el seitán, y la quinua son las mejores fuentes de proteína; aunque también puedes encontrar en las verduras de hoja verde (col rizada, brócoli, algas, guisantes y espinacas), en granos (arroz integral, pasta y pan integral, quinua y bulgur) y frutos secos (nueces de Brasil, cacahuetes, anacardos , almendras, pistachos y nueces).
Tomar suficiente proteína en tu alimentación no es tan difícil. Sólo tienes que estar al tanto de qué alimentos vegetales son ricos en proteínas y tratar de incluir alguno en cada comida.
Aquí te dejamos algunas ideas de cómo conseguir una ración de proteínas:
- Tofu revuelto / Salteado con tofu
- Hamburguesa vegetariana
- Sándwich de tempeh
- Wrap de hummus
- Sopa de lentejas / Boloñesa
- Ensalada / Hamburguesa / Pilaf
de quinua
Hemos recopilado un montón de fantásticas recetas llenas de proteínas y estamos seguros de que el único reto será ¡encontrar tiempo para probar todas!
Es importante recordar que los alimentos que te dan la sensación de estar lleno son muy calóricos y ricos en proteínas. Si solo eliminamos los productos animales de una alimentación estándar, nos quedamos con alimentos bajos en calorías, como ensaladas, verduras y frutas. Si solo comemos este tipo de alimentos, pronto nos enviaremos hambrientos y débiles. Hay mucha gente que comente este Fallo, y por eso piensa que ser vegano es un reto muy difícil.
Muchos productos animales tienen un 50% de grasa. Al eliminarlos, la ingesta de lípidos (sobre todo los saturados) se reduce notablemente, lo que puede ser muy beneficioso, especialmente si se tiene colesterol alto. Pero hay que usar de consumo de grasas vegetales; estas son las buenas y necesarias para la salud. Entre las fuentes vegetales de grasa se incluyen: los frutos secos, las semillas, los aguacates, las aceitunas y los aceites vegetales.